El colegio La Concepción de Montalbán fue fundado en 1958 por las Religiosas Concepcionistas Misioneras de la Enseñanza, congregación religiosa de origen español, fundada por Santa Carmen Sallés.
Las Religiosas Concepcionistas llegan a Venezuela el 10 de mayo de 1957. A partir de esta fecha, comienza en el país, la misión educativa evangelizadora que ve hoy sus frutos en ocho instituciones educativas, de ellas el colegio La Concepción de Montalbán es la tercera en fundarse.
La primera comunidad de religiosas se instaló en una casa ubicada en la avenida El Estadio de El Paraíso y estaba constituida por siete religiosas: cuatro trabajaban como maestras de primaria en el colegio San Agustín de El Paraíso y tres en el incipiente colegio. Solo había una maestra seglar: Lola Ríos de Mendoza, quien actualmente, después de muchos años de una labor pedagógica excepcional y de haber dejado huella en las generaciones de alumnas concepcionistas que todavía la recuerdan, es la responsable de la biblioteca de la institución.
Se inició el curso escolar en los niveles de kínder, primero y segundo grados. En años sucesivos se completó la primaria y el ciclo básico común de aquel entonces. En poco tiempo, el local resultó insuficiente para dar acogida al creciente alumnado, por lo cual, se hizo necesario alquilar otra quinta contigua llamada Berta.
En el año 1960, se comienza a parcelar los terrenos de Montalbán. Las religiosas piensan en la posibilidad de conseguir una de las parcelas lo suficientemente extensa para construir un colegio. Se les ofrece una parcela anexa a la cual se encuentra una zona verde de 18.000 metros cuadrados, ideal para un campo deportivo y zona recreativa.
Al trasladarse el colegio a Montalbán, la casa de El Paraíso funcionó como sede de la Delegación hasta el año 1971, año en que se vende la casa para ayudar al financiamiento de la construcción del nuevo colegio.
El colegio La Concepción de Montalbán, comenzó a funcionar en el año escolar 1966-1967, fecha en que fue trasladado el alumnado de El Paraíso. Es el primer colegio concepcionista construido de planta en Venezuela, hasta entonces todos eran casas acondicionadas para fines educativos. Fue edificado en dos etapas. En la primera se construyeron únicamente aulas, algunas de las cuales fueron, al principio, la vivienda de las religiosas. En la segunda, 1972, la ampliación consistió en la construcción de la capilla, el auditorio, los laboratorios y la residencia de las religiosas.
En los años sucesivos, se fueron haciendo mejoras y ampliaciones de acuerdo a las necesidades detectadas y en atención a los signos de los tiempos. En la actualidad, se cuenta con cancha de fútbol, canchas de volibol, basquetbol, parques infantiles, cancha techada para usos múltiples, laboratorios de informática, entre otras dependencias.
El carisma concepcionista, que tiene como referencia a Jesucristo y al evangelio y está inspirado en el Misterio de María Inmaculada, se traduce en la misión educativa evangelizadora preventiva, integral, liberadora y personalizada.
Va dirigida a la persona considerada en su totalidad, educa la mente y el corazón, cultiva la interioridad y la verdad, la bondad y la belleza, la transparencia y la gratuidad, favorece opciones creativas y libres. Invita a los educadores a ser “aljibes que se llenan, por el estudio y la oración, de ciencia y de virtud para después repartirlas”. (Santa Carmen Sallés).